En la ciudad de Atenas, en el recinto de la Acrópolis se alza la Torre de los Vientos. Es un edificio helenístico que data del siglo I antes de Cristo y que guardaba en su interior una clepsidra, una máquina de agua que gota a gota servía para medir el tiempo. En sus ocho fachadas se reproducían los ocho frisos alegóricos, tallados en mármol, que representan los ocho vientos dominantes en aquellas latitudes. Interesado en la representación del paso del tiempo y sus características meteorológicas hago un homenaje a aquella torre y a los trabajos puramente escultóricos, en los que represento ocho bajo relieves en acero, latón y oro, y que se vinculan por la forma y por sus nombres, directamente con aquellos vientos alegóricos. Los meses es una colección de escultura realizada en latón macizo con uniones atornilladas, y que están inspirada en las maquinarias de los relojes mecánicos del siglo XIX.
El fin último de mi trabajo de escultura dirige su atención a la búsqueda de la Belleza, búsqueda sistemática, casi científica con la que acercar al espectador al placer en la contemplación. La escultura desvela conceptos guardados en las capas más profundas de la mente.